Los niños y niñas, a medida que crecen, aprenden gradualmente las normas sociales. Sin embargo, es común que hagan comentarios inapropiados en público debido a su falta de experiencia para identificar lo adecuado según el contexto. Con el apoyo de padres y educadores, estos aprendizajes se dan de manera progresiva. Aquí te presentamos algunas estrategias clave para enseñar a tu hijo/a a comportarse adecuadamente en estos casos.
1. Explica los límites sociales
Es fundamental que tu hijo/a comprenda que algunos temas deben mantenerse en privado. Usa un lenguaje simple y adecuado a su edad para resaltar que lo que se dice en casa no siempre es apropiado en público.
Ejemplo: “En casa podemos hablar de todo, pero en público es mejor no hablar de cosas privadas.”
2. Practica situaciones con ejemplos
Crea situaciones hipotéticas donde tu hijo/a pueda practicar cómo comportarse en diferentes contextos. Esto le permitirá aprender cuándo algo es adecuado y cuándo no.
Ejemplo: “Si alguien te pregunta por qué estás triste en una fiesta, ¿cómo responderías?”
3. Refuerza el buen comportamiento
Cuando tu hijo/a haga comentarios apropiados, refuerza este comportamiento con elogios. Esto le ayudará a asociar conductas positivas con recompensas emocionales.
Ejemplo: “Qué bien lo hiciste al no hablar de eso en la tienda. Has mostrado mucho respeto por los demás.”
4. Fomenta la empatía
Enséñale cómo sus palabras pueden afectar a los demás. A través de ejemplos, puede entender que algunas frases pueden incomodar o hacer sentir mal a otras personas.
Ejemplo: “Si le dices a alguien que se ve raro/a, eso puede hacerlo sentir triste. Mejor piensa si lo que vas a decir podría incomodarlo/a.”
5. Establece consecuencias claras
Si persisten los comentarios inapropiados, establece consecuencias claras para que tu hijo/a entienda que sus acciones tienen repercusiones. Esto le ayudará a desarrollar autocontrol.
Ejemplo: “Si haces comentarios inapropiados en público, nos iremos antes de lo planeado.”
6. Mantén la paciencia
Recuerda que el aprendizaje de normas sociales lleva tiempo. La constancia y paciencia son esenciales para lograr que tu hijo/a interiorice estas lecciones de manera efectiva.
7. Controla el uso de las redes sociales
El acceso temprano a redes sociales puede afectar las habilidades sociales de los niños, ya que los expone a comentarios inapropiados y reduce las interacciones cara a cara. Para evitarlo, los padres y madres deben supervisar su uso y fomentar actividades sociales reales. Dispositivos como el reloj inteligente con GPS y llamadas permiten una comunicación segura, sin los riesgos que conlleva el uso de las redes sociales.
Conclusión
Enseñar a tu hijo/a a moderar sus comentarios en público no solo mejora su comportamiento social, sino que también fomenta su desarrollo emocional. Según Goleman (2021), la inteligencia emocional es clave para que los niños comprendan el impacto de sus palabras y aprendan a gestionar sus impulsos. Con paciencia y consistencia, les proporcionamos las herramientas para convertirse en adultos emocionalmente equilibrados, capaces de tomar decisiones empáticas en sus interacciones cotidianas.
Referencias bibliográficas
Goleman, D. (2021). Inteligencia emocional. Reverté.