El impacto de las redes sociales en los menores está en el centro del debate. En 2025, las demandas y legislaciones contra plataformas como TikTok, Instagram y Snapchat continúan en aumento, con nuevas restricciones en varios estados de EE.UU. Según Arianna Prothero, periodista de Education Week, distritos escolares han emprendido acciones legales contra gigantes tecnológicos como Meta, Google y ByteDance, acusándolos de contribuir al deterioro de la salud mental infantil.
California y Florida ya han aprobado leyes para limitar el acceso de los menores, aunque muchas están siendo impugnadas en los tribunales.
Además, el director de Sanidad de EE.UU. recomienda incluir advertencias sobre los riesgos psicológicos de las redes sociales, mientras que Meta elimina verificadores de datos, avivando preocupaciones sobre desinformación.
La polémica en torno a TikTok y la influencia política
La posible prohibición de TikTok en EE.UU. sigue generando controversia. Aunque Donald Trump apoyó su veto en su primer mandato, cambió de postura en 2024 y ahora aboga por evitar su prohibición. Con 14 millones de seguidores en la plataforma, su administración podría influir en futuras regulaciones.
Impacto en la educación y la salud mental
Los docentes advierten que el uso excesivo de redes sociales fomenta el acoso, las peleas escolares y la falta de atención en clase. Mientras tanto, las grandes tecnológicas han implementado controles parentales y cuentas con mayor privacidad para menores. Sin embargo, los estudios sobre el impacto real en la salud mental aún ofrecen resultados mixtos.
Ante estas preocupaciones, muchas familias y educadores buscan alternativas que permitan a los menores estar conectados sin los riesgos asociados a las redes sociales. Opciones como los relojes inteligentes con GPS y llamadas están ganando popularidad como herramientas para mantener la comunicación de forma segura y controlada.
Hacia un 2025 con mayor control y educación digital
La tendencia apunta a una regulación más estricta de algoritmos y contenidos para jóvenes, con estados como California prohibiendo la personalización de contenido basada en datos de menores sin consentimiento paterno. Además, la educación digital podría jugar un papel clave en la protección de los jóvenes en el entorno online.
