¿Te ha pasado alguna vez que tu hijo/a se entristece o se enfada si no puede participar en una actividad? Por ejemplo, en un partido de fútbol, si no es titular o no lo eligen para formar parte de un juego, puede sentirse fuera de lugar, como si no formara parte del grupo. Este tipo de situación es común en niños/as que sienten una fuerte necesidad de pertenencia y puede generar emociones negativas.

En este artículo encontrarás consejos para ayudar a tu hijo/a a manejar estas emociones, comprender que hay diferentes formas de contribuir y sentirse valorado/a, incluso cuando no participa directamente.

1. Habla con tu hijo/a sobre la importancia de diferentes roles

Explícale que no siempre es necesario participar directamente para ser parte de un grupo. Ayúdale a entender que observar, animar o apoyar son roles igualmente importantes.

Para ello, usa frases como:

• “Observar te permite aprender cosas nuevas que puedes llevar a la práctica más tarde.”
• “Apoyar a los demás también es una forma importante de formar parte del equipo.”

2. Dale una tarea específica como observador/a

Cuando no pueda participar, ofrécele un papel activo como observador/a. Por ejemplo:

• Contar el tiempo: si es un deporte, puede medir cuánto dura una jugada.
• Animar a sus compañeros/as: motívalo/a a ser el mayor apoyo del grupo, animando o aplaudiendo. Esto le ayudará a sentirse útil y valorado/a, aunque no esté directamente involucrado/a en la actividad.

3. Refuerza positivamente su papel

Reconoce y elogia su contribución como observador/a o animador/a. Los niños/as necesitan saber que sus esfuerzos son importantes.

Cómo hacerlo:

• “Has hecho un gran trabajo animando a tu equipo, eso les ha ayudado mucho.”
• “Gracias a ti, todos se han sentido apoyados. Eres una parte fundamental del grupo.”

4. Enseña que hay momentos para todo

Habla sobre la importancia de los turnos y el equilibrio entre participar y descansar. Puedes usar ejemplos cotidianos:

• En la familia: “No siempre cocinamos todos a la vez, pero cada uno tiene su momento.”
• En el colegio: “Los profesores no hablan todos al mismo tiempo, cada uno enseña algo distinto cuando le toca.”

5. Fomenta su autoestima más allá de la actividad

Ayuda a tu hijo/a a entender que su valor no depende de participar en todo. Refuérzale con mensajes que destaquen sus cualidades personales, como la empatía, la creatividad o la paciencia.

Conclusión

Es importante que los padres ayuden a sus hijos/as a comprender que no siempre es necesario estar al frente para sentirse parte de un grupo. Al enseñarles a aceptar roles alternativos y a gestionar sus emociones cuando no son los protagonistas, les estamos dando herramientas para enfrentar situaciones sociales con confianza y madurez. Fomentar la observación activa y el apoyo a los demás también les ayuda a sentirse valorados, incluso sin estar directamente involucrados.

Con estas acciones, tu hijo/a no solo aprenderá a disfrutar de los momentos en los que no participa directamente, sino que además adquirirá una perspectiva más equilibrada de lo que significa ser parte de un grupo, algo que le servirá a lo largo de su vida.