You are currently viewing Los peligros del sharenting: el 72% de las imágenes en redes de pedofilia provienen de fotos familiares

Los peligros del sharenting: el 72% de las imágenes en redes de pedofilia provienen de fotos familiares

El sharenting, la práctica de compartir fotos y datos de menores en redes sociales, se ha convertido en una preocupación creciente. Aunque muchos padres lo ven como algo inofensivo, los expertos advierten que puede poner en riesgo la seguridad y el bienestar de los niños.

Según un artículo publicado en El País por Belén Kayser, la activista Natalia Díaz, más conocida en redes como Medianoche, lleva años denunciando esta problemática. Con más de 37.000 seguidores en Instagram y 114.000 en YouTube, Díaz ha convertido la protección de la infancia en su principal lucha. Además, colabora con el Ministerio de Juventud e Infancia en la creación de una ley para proteger a los menores en el entorno digital.

Su reciente libro, Protege a tus hijos de la sobreexposición en la red (HarperCollins, 2024), analiza los riesgos del sharenting y propone estrategias para evitarlo.

Los riesgos del sharenting

El sharenting no solo expone la vida privada de los niños, sino que también puede ser aprovechado por terceros con intenciones malintencionadas. Algunos de los principales riesgos son:

🔹 Uso indebido de imágenes: según un estudio de la Universitat Oberta de Catalunya (2023), el 72% del material incautado en redes de pedofilia proviene de fotos compartidas por las propias familias en redes sociales.

🔹 Vulneración del derecho a la privacidad: los menores no pueden dar su consentimiento informado para la publicación de sus imágenes, lo que puede generar conflictos legales en el futuro.

🔹 Impacto en su bienestar emocional: Díaz advierte que muchos niños han sido convertidos en “niños meme”, ridiculizados en redes y han sufrido consecuencias psicológicas por la sobreexposición.

🔹 Riesgo de fraude y suplantación de identidad: datos personales expuestos en redes pueden ser utilizados por ciberdelincuentes para estafas o incluso el secuestro digital de la identidad de los menores.

🔹 Normalización del uso comercial de los menores: muchas marcas y creadores de contenido utilizan a los niños para aumentar el engagement y obtener beneficios económicos. “No todos los niños hacen campañas publicitarias, pero todos generan ingresos para las cuentas de sus padres”, explica Díaz.

“Ninguna foto de menores debería compartirse en internet”

Díaz es tajante: “¿Vas a la salida del metro y empiezas a repartir fotos del álbum familiar a todo el mundo? Pues eso es lo que haces al compartir imágenes de tus hijos en redes.”

A pesar de los riesgos, muchas familias siguen justificando el sharenting con argumentos como el uso de perfiles privados en Instagram. Sin embargo, Díaz señala que esto no es suficiente:

“El contenido puede filtrarse, descargarse y compartirse sin tu conocimiento. Además, hay casos de pedofilia incluso dentro de entornos familiares. Lo que compartes con tu círculo cercano puede terminar en manos equivocadas.”

En países como Francia e Italia, el sharenting ya está regulado. En Francia, los padres pueden ser sancionados por compartir imágenes de sus hijos sin considerar su privacidad. España, por su parte, avanza en un anteproyecto de ley para establecer normativas en este ámbito.

Consejos para proteger la privacidad de los niños en internet

Natalia Díaz ofrece algunas recomendaciones para evitar la sobreexposición de los menores:

Evita compartir imágenes de tus hijos en redes sociales. Aunque parezca inofensivo, puede tener consecuencias imprevisibles.

No publiques datos personales como ubicaciones, horarios escolares o nombres completos.

Fomenta la privacidad digital en casa. Enseña a los niños y adolescentes a proteger su identidad en línea.

Revisa la configuración de privacidad de tus redes y evita que extraños puedan acceder a tu contenido.

Denuncia contenido inapropiado que vulnere los derechos de los menores.

“Muchos prefieren mirar hacia otro lado”

Díaz ha recibido mensajes de influencers y familias que han tomado conciencia tras conocer su activismo. Algunas influmamis le han confesado que han cambiado su forma de crear contenido después de ver sus vídeos.

“Una influencer bastante conocida me dijo que en sus noches de insomnio veía mis vídeos uno tras otro. Ahora está cambiando su contenido.”

Sin embargo, también ha enfrentado críticas y resistencia:

“Muchas familias sienten culpa, pero prefieren tacharme de hater en lugar de afrontar la realidad. Incluso he recibido amenazas por hablar de este tema.”

Para Díaz, el cambio solo llegará con una combinación de concienciación y legislación. Cree que las familias deben reflexionar sobre el daño potencial del sharenting antes de que existan consecuencias graves.

“Mucha gente dice: ‘Hasta que no pase algo gordo, nada cambiará’. Pero ya hemos visto niñas con imágenes modificadas con inteligencia artificial, casos de grooming y testimonios de menores afectados… No aprendemos.”

Conclusión

El sharenting sigue siendo una práctica común, pero cada vez más voces alertan sobre sus riesgos. Natalia Díaz ha convertido su lucha en un llamado de atención a las familias, las marcas y las instituciones para que protejan la privacidad de los menores en internet.

A medida que España avanza en la regulación de este fenómeno, la reflexión de cada familia es clave: ¿realmente es necesario compartir fotos de nuestros hijos en redes?